La Sociedad Americana de Química publicó un estudio sobre las propiedades beneficiosas de las palomitas de maíz, en donde se destacó la cantidad de antioxidantes y polifenoles. Esta investigación supondría que estos granos crujientes son un aperitivo rico y sano para compartir en familia. Sin embargo, debes tomar en cuenta diferentes consideraciones.
Para empezar, es necesario determinar si el tipo de palomitas es de grano natural o para calentar en microondas. También, si tienen condimentos agregados o demasiada sal. Cada uno de estos factores condicionan el aporte nutricional de este aperitivo.
Siempre es recomendable su consumo moderado porque 100 gramos de estos granos aportan 370 Kcal.
Propiedades de las palomitas de maíz
Las palomitas se preparan a partir de la exposición de granos a altas temperaturas. Contienen 60 gramos de carbohidratos y 10 gramos de proteínas. Además, aportan minerales como fósforo, magnesio, potasio y vitaminas del grupo B.
Los últimos estudios han resaltado su contenido de polifenoles y carotenoides, lo catalogan como un snack saludable que aporta antioxidantes. Otra ventaja del consumo de las palomitas de maíz es que no tienen gluten, así que su consumo es ideal para las personas que sufren de intolerancia a este tipo de proteína.
La cantidad de grasa depende del aceite que le agregues. Cuando las palomitas de maíz son naturales no aportan nada de colesterol, excepto si se usa mantequilla para cocinarlas.
¿Cómo prepararlas de manera saludable?
Normalmente, las palomitas contienen ingredientes como maíz, grasa, sal y, en algunos casos, aditivos antioxidantes. A pesar de que los aceites sean de origen vegetal, no siempre son los más recomendables para tu salud.
Si realmente buscas aprovechar las propiedades beneficiosas, lo aconsejable es prepararlas de manera casera. Es preferible que dejes a un lado las palomitas de maíz hechas para microondas y saques los granos naturales.
Para hacer las palomitas de maíz en casa debes agregar granos de maíz en una sartén bien caliente y untarlas con unas gotas de aceite de oliva. Mueve continuamente la sartén para prevenir que se quemen los granos.
Una vez empiecen a explotar, baja la temperatura y continúa moviendo la sartén hasta completar su cocción. Añade una pizca de sal para un sabor más delicioso.
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