¿Qué significa la frustración sexual? ¿Cómo se sabe que se está frustrado sexualmente?
Para algunos, la situación puede ponerse tensa cuando hay una desconexión entre el deseo o la excitación sexual y la realidad.
Esta desconexión en las expectativas quiere, y la falta de actividad o placer a menudo conduce a la respuesta normal de la frustración sexual.
¿Qué Es La Frustración Sexual?
En pocas palabras, la frustración sexual es la decepción que se produce al no poder satisfacer los impulsos sexuales.
Estar frustrado sexualmente suele describir un estado de estrés, agitación o irritación causado por la inactividad sexual o por un estado de insatisfacción con el sexo en general.
La frustración sexual afecta a personas de todas las sexualidades, edades y géneros. También puede ser un problema incluso en las relaciones comprometidas.
¿Es Normal?
Sí. La frustración sexual es normal, aunque puede ser frustrante, con todo derecho.
Es perfectamente normal tener sentimientos y sensaciones incómodas cuando se quiere tener sexo y no se puede.
Ya sea porque dos personas no son sexualmente compatibles, porque hay un problema con la función sexual o porque alguien está soltero, la mayoría de las personas experimentan frustración sexual en algún momento de su vida.
Causas
Se suele suponer que la causa de la frustración sexual es simplemente no tener suficiente sexo, pero la frustración sexual suele ser una señal de que algo más grande está sucediendo.
Cuando surge la frustración sexual, es más importante centrarse en el porqué de la situación que en la situación en sí.
Conocer el por qué cuando se trata de no tener buen sexo permite abordar la situación de forma adecuada.
Las causas legítimas de no tener suficiente sexo o de no tener sexo satisfactorio pueden estar relacionadas con el cuerpo, la mente e incluso con situaciones o relaciones.
Algunas causas fundamentales relacionadas con el cuerpo pueden ser
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Una lesión – Ciertas lesiones pueden hacer que el sexo no sea posible o sea doloroso
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Ciertas enfermedades – Algunas enfermedades y dolencias inhiben el deseo sexual, prohíben la función sexual o se interponen en el camino de la gratificación sexual
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Dolor crónico – El dolor crónico puede interferir con el deseo y el acto sexual en sí
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Adicciones – El uso/abuso de sustancias o alcohol puede inhibir el deseo y la función
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Problemas ginecológicos – Los partos, las relaciones sexuales dolorosas y otros problemas ginecológicos pueden inhibir la satisfacción sexual
Algunos problemas emocionales también pueden interferir en el sexo, como por ejemplo
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Estrés
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Ansiedad
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Depresión
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Trauma/desorden de estrés postraumático