En las redes sociales cada vez inventan más modas, poco fundamentadas, sobre cómo hacer ejercicio o qué suplementos consumir, pero algunos ya se fueron al extremo. Un ejemplo de ello fue un joven que fue captado en video comiendo alimento para perro mientras estaba en el gimnasio.
En TikTok, el usuario @golo865 compartió un extraño video en el que un joven que hacía ejercicio en un gimnasio, detuvo su rutina para comer alimento para perro en un sobre, lo cual generó sensación en redes.
Así comió alimento joven en gimnasio
En el video se observa a un joven sentado en un hack para hacer pierna que, al parecer, estaba usando al revés. Junto a él, estaba un bidón para hidratarse y un sobre de comida para perro de raza pequeña, sabor filete de res, abierto.
Ante esto, el deportista tomó el alimento para perro y dio una mordida al sobre, para comer su contenido. Sin embargo, dejó algo para más tarde, ya que después se ve al aficionado del gimnasio seguir consumiendo el alimento para perro, mientras estaba sentado en otra máquina, viendo su celular.
@golo865 Me bajaron el otro 😬#gym #gimnasio #elcampeon #Calvo #ejecicio #fyp #cdjuarez #traka #humor #fakebodyy⚠️ ♬ Creepy and simple horror background music(1070744) – howlingindicator
Por qué no debes comer comida de perro pese a tener mucha proteína
Si antes había que advertir a los niños de que no hicieran en casa todo lo que veían en la televisión, ahora hay que avisarles de que no repitan lo que ven a través de TikTok. Por ejemplo, el influencer Henry Clarisey ha decidido ganarse a sus decenas de miles de seguidores ingiriendo comida de perro por su alto valor en proteínas. Sin embargo, esta práctica es peligrosa por mucho que este chico nos diga que su ración tiene 66 gramos de proteína.
La razón por la que no se debe ingerir comida de perro es que este alimento puede contener harina de huesos y de órganos como los pulmones. Se tratan de sustancias que nuestro organismo no está acostumbrado a ingerir. Además, en el proceso de elaboración no se eliminan algunas bacterias peligrosas para nuestro aparato digestivo, pero inocuas para el de los perros.
Por supuesto, tampoco tenemos las mismas necesidades nutricionales que nuestras mascotas; necesitamos menos proteínas, mientras que ellos precisan también de más sodio.