Si estás lidiando con fiebres, dolores de cabeza, escalofríos, dolor y agotamiento puro por no menos de siete a diez días, es seguro decir que estás lidiando con un caso de gripe, y este año es peor que nunca.
Y en los niños podría ser peor. Sin embargo, podemos prevenir la gripe con ciertos cuidados.
¡Estas son algunas recomendaciones para prevenir la gripe en los niños!
Mantenlo hidratado
Nuestro cuerpo está constituido por 50 a 60 por ciento de agua. Mantenerse hidratado es importante cuando se trata de funcionar de manera óptima.
El agua ayuda en la digestión, lubricación y oxigenación dentro del cuerpo. También, juega un papel importante en la eliminación de toxinas del cuerpo y en la producción de linfa en el sistema inmunológico, que ayuda a transportar células que combaten enfermedades en todo el cuerpo.
Un buen indicador de cuán hidratado está el niño, es el color de su orina. No siempre es punto de referencia atractivo, pero es útil saber que cuanto más claro sea el color de la orina, más hidratado estará generalmente.
Asegúrate de que está recibiendo suficiente vitamina D
Las investigaciones muestran que ingerir suficiente vitamina D es un factor que contribuye a la salud de su sistema inmunológico, ya sea que ingiera algo de dieta o que absorba entre cinco y diez minutos de sol. Esta es una de las mejores maneras de prevenir la gripe.
Dormir bien
Dormir y más dormir. El dormir es tan bueno para nuestros cuerpos, y muy a menudo lo dejamos caer por el camino.
Cuando dormimos, nuestros cuerpos tienen la oportunidad de restaurar, reconstruir y reconectarse. También es una oportunidad para que tu mente se relaje. El sueño, sus ritmos circadianos y su sistema inmunológico están todos interconectados, y cuando no duerme lo suficiente, su sistema inmunológico está suprimido y así es más susceptible de contraer algo que lo puede enfermar. Los adultos en promedio necesitan de siete a nueve horas de sueño por noche, ahora los niños necesitan más.
Hagan suficiente ejercicio
El ejercicio te hace sentir más feliz, más saludable y con más energía. Puede ser difícil motivarse para hacerlo, pero una vez que hayan terminado y sus endorfinas estén fluyendo, se sentirán bien.
El ejercicio es una excelente manera de disminuir la cantidad de hormonas del estrés liberadas por el cuerpo, y el estrés puede disminuir la funcionalidad del sistema inmunológico. Más ejercicio y menos estrés pueden ayudar al cuerpo a combatir las infecciones, y es una excelente manera de limpiar, sudar y eliminar las toxinas.
Cuando se trata de elegir el tipo de ejercicio en el que participarán, solo asegúrate de elegir algo que realmente les guste hacer para que el ejercicio sea más divertido.
Priorizar la alimentación
!Eres lo que comes! Por lo que las decisiones que tomas sobre cómo alimentar tu cuerpo afectan todo, incluido tu sistema inmunológico. El azúcar, junto con los alimentos inflamatorios como el gluten, los lácteos y la soya, afectan negativamente la capacidad de tu cuerpo para funcionar de manera óptima, pero también hay ciertos alimentos que juegan un papel importante en el apoyo de tu sistema inmunológico.
Tomar probióticos
El estrés, la dieta y las toxinas pueden afectar la proporción de bacterias intestinales sanas e insalubres dentro del cuerpo. Con aproximadamente el 70 por ciento de tu sistema inmunológico en tus intestinos, el equilibrio entre las bacterias intestinales buenas y malas es importante para mantenerse saludable. Agregar un probiótico diario puede ser útil, y si no quieren tomar un suplemento, enfócate en alimentos fermentados como kimchi, chucrut y pepinillos.
