
Este martes se dio a conocer que Starbucks se arriesgó con su nueva política para los consumidores, y está dando buenos resultados.
Y es que las marcas están en constante evolución, adaptándose a nuevas tendencias de mercado, regulaciones y demandas de los consumidores. Recientemente, hemos sido testigos de un cambio significativo en las políticas de algunas empresas, que buscan no solo mejorar su imagen pública, sino también responder de manera efectiva a las expectativas de un consumidor más consciente, exigente y comprometido con la ética y la sostenibilidad.
Según un informe de Nielsen el 70 por ciento de los consumidores prefieren marcas que mantienen una coherencia en sus nuevos cambios, destacando que cualquier cambio en estos aspectos puede llevar a una disminución en la conexión emocional con los consumidores.
Starbucks se arriesga con esta nueva política
El gigante del café ha estado trabajando para posicionar sus locales como cafeterías tradicionales donde las comunidades puedan “sentarse y quedarse”, y está dando resultados, según cifras compartidas.
A finales de enero, Starbucks implementó una nueva política de recarga donde los clientes que piden en la tienda deben indicar si desean su bebida “para tomar aquí” o “para llevar”.
Quienes piden “para aquí” reciben su bebida en una taza de cerámica, un vaso o una taza individual. Pueden obtener rellenos gratuitos durante su visita: café caliente o helado, o té caliente o helado.
Starbucks reveló que durante las últimas tres semanas, “la cantidad de clientes que eligen tazas y vasos de cerámica para sentarse y permanecer en cafés ha aumentado en promedio más de 3 veces en los EE. UU.”.
Los clientes deben consumir su primera bebida en uno de estos vasos reutilizables para recibir recargas gratuitas, y ningún vaso desechable ni de plástico puede recibir recargas gratuitas, lo que anima a algunos clientes a quedarse un tiempo.
El nuevo director ejecutivo, Brian Niccol, quien asumió el cargo en septiembre, declaró en la junta anual de accionistas de la compañía la semana pasada que estaba “complacido con la pronta reacción de los clientes y socios a los cambios que hemos implementado”.
Estos cambios se producen en un momento en que Starbucks espera aumentar la afluencia de clientes y las ventas como parte de su iniciativa “De vuelta a Starbucks”, un plan para simplificar la oferta y volver a sus orígenes.
Para llevar o para beber aquí
La compañía está “apoyándose en nuestra cultura del café”, declaró Tressie Lieberman, directora global de marca de Starbucks, a Axios.
“Estamos restableciendo a Starbucks como la cafetería comunitaria y reintroduciendo Starbucks al mundo”, añadió Lieberman.
El gigante del café busca expandir su alcance invirtiendo en anuncios en televisión y streaming que evoquen la sensación de ‘Quiero ir a Starbucks’.
Starbucks ya ha comenzado a probar nuevos diseños en algunas ubicaciones, recuperando asientos y espacios más cómodos, lo que le da a las tiendas un ambiente tradicional donde los clientes pueden sentarse durante horas para relajarse o teletrabajar.
Los nuevos diseños incluyen más opciones de asientos, enchufes y abundantes exhibidores de comida, así como algunas ubicaciones con mayor separación entre la cafetería y la experiencia de pedidos móviles, según reveló la compañía a Axios.
Asimismo, se sabe que Niccol ha estado implementando varios cambios en la popular cadena de cafeterías desde que se incorporó procedente de Chipotle.
Al comenzar, señaló que una de sus prioridades para acelerar el crecimiento de la empresa era simplificar el menú, excesivamente complejo, para que los baristas pudieran agilizar el servicio, con el objetivo de reducir aproximadamente el 30 por ciento de las opciones de comida y bebida de su menú para finales de 2025. A principios de mes, Starbucks eliminó 13 bebidas de su menú.
La compañía también anunció recientemente que los usuarios de la app y el sitio web de Starbucks ya no podrán realizar ciertas modificaciones, ya que estos cambios se incluyen en las bebidas que ya están en el menú.