El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha presentado una demanda antimonopolio contra Visa, alegando que el gigante de los servicios financieros utiliza su tamaño y dominio para sofocar la competencia en el mercado de tarjetas de débito, costándole a los consumidores y a las empresas miles de millones de dólares.
La denuncia presentada el martes dice que Visa, con sede en San Francisco, penaliza a los comerciantes y bancos que no utilizan la tecnología de procesamiento de pagos de Visa para procesar transacciones de débito, a pesar de que existen alternativas. Visa obtiene una comisión adicional por cada transacción procesada en su red.
Según la denuncia del Departamento de Justicia, el 60% de las transacciones de débito en Estados Unidos se realizan en la red de débito de Visa, lo que le permite cobrar más de 7 mil millones de dólares en tarifas cada año por procesar esas transacciones.
“Afirmamos que Visa ha acumulado ilegalmente el poder para cobrar tarifas que superan con creces lo que podría cobrar en un mercado competitivo”, dijo el Procurador General Merrick B. Garland en una declaración. “Los comerciantes y los bancos trasladan esos costos a los consumidores, ya sea aumentando los precios o reduciendo la calidad o el servicio. Como resultado, la conducta ilegal de Visa afecta no solo el precio de una cosa, sino el precio de casi todo”.
En una declaración, Julie Rottenberg, asesora general de Visa, dijo que la demanda no tiene en cuenta el «universo en constante expansión de empresas que ofrecen nuevas formas de pagar bienes y servicios».
“La demanda de hoy ignora la realidad de que Visa es sólo uno de los muchos competidores en un espacio de débito que está creciendo, con nuevos participantes que están prosperando”, dijo Rottenberg. Agregó que la demanda “no tiene fundamento” y que la compañía se defenderá “vigorosamente”.
La administración Biden ha perseguido agresivamente a las empresas estadounidenses que, según afirma, actúan como intermediarias, como Live Nation , la empresa matriz de Ticketmaster, y la empresa de software inmobiliario RealPage , acusándolas de cargar a los estadounidenses con tarifas absurdas y comportamiento anticompetitivo. La administración también ha presentado cargos de comportamiento monopolístico contra gigantes tecnológicos como Apple y Google.
“En algunas de las acciones antimonopolio del Departamento de Justicia, el daño causado por la presunta conducta ilegal es más visible: precios más altos para los viajes en avión, para las entradas de conciertos, para los teléfonos inteligentes”, dijo Garland durante una conferencia de prensa en Washington el martes. “Los efectos nocivos de la presunta conducta anticompetitiva de Visa son menos visibles, pero no son menos dañinos”.
Según la denuncia del Departamento de Justicia, presentada en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York, Visa aprovecha la gran cantidad de transacciones en su red para imponer compromisos de volumen a los comerciantes y sus bancos, así como a las instituciones financieras que emiten tarjetas de débito. Eso dificulta que los comerciantes utilicen alternativas, como procesadores de pago de menor costo o más pequeños, en lugar de la tecnología de procesamiento de pagos de Visa, sin incurrir en lo que el Departamento de Justicia describió como «sanciones por deslealtad» por parte de Visa.
El Departamento de Justicia afirmó que Visa también sofocó la competencia al pagar para celebrar acuerdos de asociación con competidores potenciales.
En 2020, el Departamento de Justicia presentó una demanda para bloquear la compra por 5.300 millones de dólares de la startup de tecnología financiera Plaid , calificándola de adquisición monopolística de un potencial competidor de la omnipresente red de pagos de Visa. Esa adquisición finalmente fue cancelada.
Visa reveló previamente que el Departamento de Justicia estaba investigando a la compañía en 2021, diciendo en una presentación regulatoria que estaba cooperando con una investigación del Departamento de Justicia sobre sus prácticas de débito.
Desde que comenzó la pandemia, más consumidores de todo el mundo han comprado bienes y servicios en línea, lo que se ha traducido en más ingresos para Visa en forma de comisiones. Incluso los negocios que tradicionalmente manejan mucho efectivo, como bares, peluquerías y cafeterías, han comenzado a aceptar tarjetas de crédito o débito como forma de pago, a menudo a través de teléfonos inteligentes.
El analista de KBW, Sanjay Sahrani, dijo en una nota a los inversores que estima que los ingresos por débito en EU probablemente representen como máximo alrededor del 10% de los ingresos de Visa.
“Una parte de eso podría perderse si hay un impacto financiero”, dijo. “El negocio de pagos al consumidor de Visa en Estados Unidos es la parte del negocio global que crece más lentamente y, en la medida en que su contribución se vea afectada, es probable que tenga un impacto muy limitado en el crecimiento de los ingresos”.
Agregó que la demanda podría extenderse por años si no se resuelve y llega a juicio.
Visa procesó 3,325 billones de dólares en transacciones en su red durante el trimestre finalizado el 30 de junio, un 7,4% más que el año anterior. Los pagos en Estados Unidos crecieron un 5,1%, un ritmo más rápido que el crecimiento económico de ese país.
Las acciones de Visa cayeron $15,85, o 5,5%, para cerrar a $272,94 el martes.
