El practicar yoga podría cambiar tu vida de manera satisfactoria, ayudando a quitar esa horrible tensión del cuerpo que todos llegamos a vivir.
La tensión adquiere una mala reputación: la vemos como negativa y restrictiva, aunque en realidad subyace en gran parte de lo que hace que nuestras vidas sean vibrantes y significativas. La tensión muscular crea la energía almacenada que necesitamos para correr rápido, saltar alto e incluso acelerar los árboles (si te gusta ese tipo de cosas). Y la emoción, la atracción, la anticipación y la pasión son formas muy placenteras de tensión emocional.
La tensión es energía. ¡Genera acción! La tensión en sí no es un problema, pero cuando se atasca, es cuando las cosas malas comienzan a suceder. Piensa, músculos tensos que no hemos estirado después de nuestros entrenamientos, o la acumulación de tensión emocional que experimentamos cuando no permitimos que la ira, el resentimiento o la ansiedad pasen a través de nosotros. Nuestro objetivo debe ser oscilar entre períodos de alta y baja tensión, para mantener un flujo saludable de energía y vitalidad, y una forma de hacerlo es desarrollar una buena práctica de yoga, sigue estos consejos y tu cuerpo entrará en un modo de relajación profunda.
Presta mucha atención a tu respiración
Nota tu ritmo natural. Las sensaciones de calidez y frialdad en tus fosas nasales a medida que el aire entra y sale de tu cuerpo. La suave subida y bajada de tu vientre y pecho. Las sensaciones de expansión y contracción en tu caja torácica. Luego, intenta liberar conscientemente cualquier sensación de contracción alrededor de tu respiración. Mantén tu respiración suave, constante, lenta, profunda y relajada. Ve cuánto esfuerzo puedes ejercer en el proceso de la respiración.
Sintoniza las áreas en las que notas que mantienes la tensión
Cuando comiences a moverte a través de las posturas al practicar yoga, intenta palpar los lugares donde mantienes la tensión. ¿Te estás agarrando con los dedos de los pies o tensando la mandíbula? ¿También arrugas alrededor de tu cuello y hombros o arrugas la frente? ¿Tal vez te das cuenta de que te sientes más o menos tenso cuando practicas a diferentes horas del día o cuando cambian las circunstancias de tu vida? Ve si puedes identificar un mapa de contracción y relajación en tu cuerpo.
A lo largo de la secuencia, intenta encontrar un equilibrio entre estabilidad y fluidez
Apunta a la fuerza y el espacio en las poses y la gracia y la agilidad en tus transiciones. Esto toma presencia y presta mucha atención a la respiración. Ejercítate lo suficiente para hacer lo mejor posible en la postura, con la menor cantidad de tensión posible y la intención de permanecer libre de lucha. Usa tu respiración como un barómetro. Si te encuentras conteniendo la respiración o esforzándote para respirar, estás presionando demasiado, así que retrocede un poco la intensidad o toma un descanso.
Cuando llegues a un estiramiento, ten cuidado de no intentar usar la fuerza para aumentar la intensidad.
Hacer esto realmente activará los reflejos de tu cuerpo y hará que tus músculos se contraigan. En lugar de eso, profundiza tu respiración, retrocede un poco fuera del tramo y luego baja una fracción más en la postura.
Tómate el tiempo para hacer (y abrazar)
Savasana es la mejor postura para disolver la tensión al momento de practicar yoga Mientras exploras tu cuerpo en busca de sensaciones, llevas una suave sensación de relajación a cualquier área de rigidez prolongada. La maestra de meditación budista Tara Brach guía a sus alumnos a visualizar la transición del hielo al agua y del agua al gas. Cuando estas relajado, tienes una mayor percepción de las sensaciones más sutiles en tu cuerpo. Con el tiempo, esto te permitirá notar una acumulación de enojo, ansiedad, frustración o decepción al inicio del ciclo y te dará la oportunidad de interrumpir el impulso antes de que se salga de control.
Si sientes tensión en tu cuerpo, ya sea físico, emocional o ambos, el yoga es una de las formas más efectivas y placenteras de relajarte. Te ayudará a darte cuenta de cuándo y dónde se aferra a la tensión en tu cuerpo. Aprenderás formas de respirar, estirarte y relajarte. Y con este nuevo espacio y libertad, toda tu vida se vuelve más vibrante y colorida.