El subgobernador de Banco de México, Jonathan Heath, anunció una pausa en los recortes a la tasa de interés de referencia, actualmente en 8.5 %, tras el reciente repunte de la inflación al 4.42 %, el nivel más alto desde noviembre de 2024.
Contexto de política monetaria
Tras tres reducciones consecutivas, Banxico decide frenar la baja de tasas para evaluar si la inflación comienza nuevamente a descender. La subyacente se situó en 4.06 %, lo que refuerza la preocupación. Heath señala que la pausa es prudente hasta que se confirme una desaceleración sostenida en los precios.
Expectativas inflacionarias y riesgos
Aunque se plantea que el alza puede ser temporal, las encuestas económicas anticipan que la inflación cerrará 2025 en promedio al 3.7 %, por encima del objetivo meta de 3 % ±1 punto. Heath advirtió que cualquier ajuste adicional de tasa dependerá del comportamiento inflacionario.
Reacciones del mercado
Analistas prevén que esta decisión aporte certidumbre a inversionistas y sectores productivos. Sin embargo, el nivel de tasa actual —comparativamente alto— podría encarecer el financiamiento empresarial y limitar la inversión y consumo interno.
Impacto en consumidores y empresas
Las tasas más altas aumentan el costo de los créditos —hipotecarios, automotrices o empresariales— lo que puede frenar la demanda agregada. Sin embargo, también protegen el poder adquisitivo, al contener el ritmo inflacionario.
Próximas decisiones del Banxico
Se anticipan reuniones trimestrales en las que se revaluará la trayectoria inflacionaria. Si se evidencia una tendencia sostenida hacia la meta, podrían retomarse recortes graduales. Heath defendió la medida como una estrategia para preservar la estabilidad económica.
Balance general
Mantener tasas elevadas busca blindar la moneda y mantener expectativas de inflación ancladas. En un entorno global de incertidumbre comercial y domestic a nivel moderado, la prudencia en política monetaria busca preservar la estabilidad sin sacrificar el crecimiento.
