Los callos en las manos son un problema estético bastante común en las personas. Aunque no suele derivar en mayores complicaciones, son molestos, perjudican la imagen y consiguen que tengamos un tacto áspero.
Si quieres volver a recuperar la suavidad en tus manos y conseguir la piel hidratada y perfecta que tanto anhelas, en este artículo te enseñamos algunos consejos que podrás aplicar para eliminar los callos de las manos.
Cómo eliminar los callos de las manos para tener unas manos suaves
Los callos o callosidades son zonas de la piel gruesas y endurecidas en consecuencia a la fricción continuada y prolongada. Es un mecanismo de la piel para protegerse del roce y son muy comunes en las plantas de los pies, aunque también pueden aparecer en las manos.
Los callos de las manos normalmente aparecen en las palmas; se trata de una piel escamosa y áspera que resulta rasposa al tacto. A veces puede tomar un color amarillo o rojizo y puede causar dolor al interior de la piel o cuando son presionados.
Muchas veces las callosidades son tan gruesas que de nada sirve hidratar las manos correctamente, pues se hace necesario eliminar esas células muertas que se han acumulado en las manos.
Por lo general, el tratamiento para quitar los callos de las manos consiste tomar medicamentos especiales para su eliminación, intervención quirúrgica por parte de un especialista para cortar la piel gruesa, el uso de guantes para proteger la piel y evitar actividades que conlleven el roce o fricción de la piel.
También existen algunos trucos caseros que se pueden poner en práctica para deshacerse de ellos y volver a tener unas manos sanas y bonitas.
1- Limón y aspirina
La aspirina es un medicamento popular que resulta ser un gran exfoliante para la piel. Ayuda a eliminar las células muertas y reparar la piel seca. Podrás aplicar este remedio cuantas veces desees, al menos una vez al día, por el tiempo que sea necesario.
Preparación
Tritura 5 aspirinas hasta convertirlas en polvo. Vierte en un molde y agrega media cucharada de jugo de limón y 1/4 de cucharada de agua. Remueve con una cuchara hasta que los ingredientes queden integrados en una pasta. Aplica el remedio sobre los callos de la mano y cubre las manos con una toalla caliente. Deja que el tratamiento actúe por 15 minutos. Pasado el tiempo, retira la toalla y lava las manos con abundante agua tibia.
2- Ácidos cítricos
El ácido cítrico también actúa como un exfoliante natural para la piel, este ayuda a remover las células muertas y la regenera, haciendo que vuelva a lucir suave y sana. Eres libre de utilizar este tratamiento cuantas veces lo desees hasta que notes diferencias en tus manos.
Preparación
Puedes utilizar el ácido de cualquier fruta cítrica, como por ejemplo un limón. Basta con cortar un limón en rodajas y aplicarlo sobre las durezas de las manos. Se recomienda vendar la zona con una gasa estéril y dejarlo actuar por un largo tiempo, debido a que su efecto es más tardado.
3- Exfoliación con piedra pómez
La exfoliación profunda de la piel con la ayuda de una piedra pómez ablanda y remueve los callos de las manos. Esta piedra, de origen volcánico, elimina las células muertas y las callosidades. Puedes aplicar este remedio 1 o 2 veces por semana para mantener tus manos suaves, al mismo tiempo que evitas que se formen nuevas durezas.
Preparación
Para llevar a cabo este tratamiento de exfoliación necesitas un poco de sal, vinagre de manzana, aceite esencial y una piedra pómez. Debes mezclar los ingredientes en un recipiente con agua tibia y colocar las manos en remojo durante unos 10 minutos. Cuando la piel esté blanda, frota los callos con la piedra pómez haciendo movimientos circulares. Vuelve a poner las manos en remojo durante 5 minutos más y finalmente seca con una toalla.
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