Nuestros estados de ánimo y motivaciones están dictados por una serie de factores, y según una nueva investigación, la inflamación es uno de ellos.
La inflamación y la dopamina
Los científicos de la Universidad de Emory descubrieron que el estar inflamado afecta directamente el sistema de dopamina de nuestro cerebro. En pocas palabras, es el motor de nuestra motivación.
La investigación propone que esta conexión dopamina-motivación-inflamación es «un mecanismo de adaptación para ayudar al cuerpo a conservar energía».
Esto quiere decir que cuando nuestro sistema inmunológico está elevado, nuestros niveles de dopamina y nuestra motivación disminuyen.
«Cuando el cuerpo está combatiendo una infección o curando una herida, el cerebro necesita un mecanismo para recalibrar su motivación», dice Michael Treadway, profesor asociado en el Departamento de Emory de Psicología.
En una manera mejor explicada, nos dicen que si tienes una inflamación crónica, tus niveles de dopamina se ven afectados y por consecuencia te sentirás desmotivada para realizar actividades.
Otras causas
Esto no es del todo impactante, dado lo que sabemos sobre la inflamación. Es la fuente de muchas afecciones médicas, como diabetes, enfermedades cardíacas, obesidad, hipertensión, cáncer, entre otras.
El estar inflamado puede ser latente o difícil de detectar. Sin embargo el dice que «Si tienes síntomas como dolores de cabeza, hinchazón, dolor en las articulaciones, erupciones, fatiga, aumento de peso, alergias, asma o problemas de humor, es más probable que tengas molestia.»
¿Qué significa esto para ti?
Si estás constantemente estresado, desmotivado o luchas contra el síndrome metabólico, existe una posibilidad de que tengas una inflamación de bajo grado.
Considera esto como un llamado a la acción: habla con tu médico sobre la inflamación, tengas o no el tipo dañino y por qué. Sólo entonces puedes tomar las medidas necesarias para calmar la inflamación (y con suerte aumentar tu motivación).