Nada peor que llevar el cabello sucio, ya que este hace parte de nuestra imagen personal, presentación, cuidado, higiene y demás. Sin embargo, esto no siempre es nuestra culpa o indica índices de desaseo.
Cuidarlo muchas veces puede tornarse pesado dependiendo del tipo de cabello que tengamos y sobre todo del cuero cabelludo. Además, el no encontrar los productos ideales para ti también pueden jugar una mala pasada.
Entender a nuestro cuero cabelludo es un proceso extenso, muchas veces de ensayar y errar en los productos, pero ante todo, requiere tiempo y atención para mantenerlo sano, ya que en él no solo influyen los factores genéticos del que podemos tener un poco de conocimiento para ayudarlo, sino que también influyen factores externos y ahí es donde puede tornarse difícil.
Aun con todo esto no es imposible mantener limpio y lindo nuestro cabello, te dejamos algunos consejos generales que con seguridad harán una gran diferencia en él; ten en cuenta qué tipo de productos se adaptan a ti para que hagas uso de ello en los casos necesarios.
1- Un buen lavado es el cabello
Esto parece muy obvio, pero es importante recalcar y traerlo como uno de los factores más importantes. Hay quienes prefieren no lavar su cabeza con mucha frecuencia, pero es importante mirar las condiciones genéticas y externas para considerar qué es lo más adecuado para ti.
Si haces ejercicio con frecuencia es importante lavar el cabello, ya que queda en él la acumulación del sudor que producimos. Tenemos un cabello graso es necesario la limpieza constante para controlar dicho problema. Si salimos diariamente o con gran regularidad a la calle, el cabello queda con todas las impurezas del aire y el ambiente, por lo que también es necesario lavarlo prácticamente cada día.
También si eres de un cuero cabelludo muy seco es importante lavarlo sobre todo con acondicionador en la raíz para hidratar el cuero cabelludo y aportarle algunas grasas.
Es decir, con la cantidad de cosas que influyen en tu cabello, es recomendable lavarlo y hacerle limpieza con mucha regularidad, ya que este está expuesto a recibir muchas impurezas del ambiente.
2- Utiliza un champú neutro
Un champú neutro ayudará a restablecer y regular el pH de tu cuero cabelludo, además procura que no contengan siliconas ni parabenos; ya que estos se acumulan en el folículo piloso y lo obstruyen, lo que puede influir en la suciedad del cabello.
3- Acondicionador y mascarillas con cuidado
Para ayudar a la nutrición y restauración del cabello, es importante hacerse mascarillas pero con control. También ten muy presente qué productos estás utilizando, revisa si son los ideales para tu cabello o si es mejor probar algún otro. Sé muy consciente de la frecuencia con la que los usas para que estos no tengan un efecto contraproducente y sean responsables del exceso de suciedad.
4- Champú seco
Si definitivamente no puedes lavarte el cabello con gran regularidad por cuestiones de tiempo u otras, este recurso te salvará algunas veces ya que permitirá que puedas mantenerlo limpio por algunos días más. Además te recomendamos llevar el cabello recogido después de aplicarlo para evitar más suciedad.
5- Recoge el cabello para dormir y usa una almohada de seda
Reposar la cabeza sobre una almohada forrada en seda disminuye en gran medida la producción de grasa del cabello, las de algodón absorben la humedad, reducen el brillo e incluso resecan el cabello. El pelo suelto se ensucia con mayor facilidad, sobre todo si tenemos piel grasa, así que recogerlo durante la noche es un gran truco que podrá ayudarte a tener el cabello limpio por más tiempo.
También puedes leer: Parches caseros para reducir las bolsas de los ojos
